Muy interesante, gracias por compartir. Me apunto el libro que recomiendas sobre este tema. El discurso Esto es agua de Wallace lo he leído, releído y hace años lo copié casi entero en mi cuaderno de citas de lecturas. Es magnífico
Totalmente, Sofía. Es un discurso con tantas capas de significado que cada vez que lo releemos o escuchamos nos deja algo nuevo. Gracias por leer y comentar.
Bravo, Genial, yo ofrezco la opción de elejir por discernimiento y ante las opciones obvias del diseño de espacios, que mejor que contar con la ingeniería social positivadO vitaminada, un poco de entorno distruptivo, incita a elegir, a cuestionar a pensar y eso es siempre bueno para todos!
Maravilloso tu texto, gracias por compartir tu sabiduría y experiencia.
Me gusta mucho esa idea del entorno que no lo da todo resuelto, sino que incita a elegir, a cuestionar, a pensar. ¿Un espacio que nos entrena en la toma de decisiones? Tiene mucha fuerza. Gracias por compartirlo, Judith.
Me ha parecido muy interesante tu aproximación a la creación de entornos saludables.
Por ejemplo, en marketing (como ciencia social) hay un área que se llama "merchandising" que se enfoca en el diseño y distribución interior de las tiendas o comercios (como los restaurantes). Así, que también todo está muy "pensando" para proveer una experiencia a la persona consumidora. Por ejemplo, el hecho que en los casinos no haya ventanas o luz natural o relojes no es casualidad; o que en el supermercado los chicles y dulces estén cerca a la caja registradora, tampoco lo es.
Me parece clave el punto de retroalimentación ambiente-persona, en el sentido que puede ser bidireccional, no somos víctimas como bien indicas Francisco.
Muy buenos ejemplos, Liliana. El de los casinos me ha parecido especialmente claro: espacios diseñados para que perdamos la noción del tiempo y sigamos consumiendo.
Una vez entendemos que el diseño no es neutral, podemos empezar a detectar cuándo juega a nuestro favor y cuándo en nuestra contra. Esa toma de conciencia es un gran primer paso.
En un centro lúdico para personas con discapacidad donde hice un voluntariado había rampas en espiral por obvias razones y facilitaba el acceso e independencia de las personas de cualquier edad y condición, cómo ceguera, discapacidad intelectual, o discapacidades físicas, además de que la vista no tenía que estar necesariamente viendo constantemente al piso sino que podía pasear y apreciar los detalles del edificio y agilizar la búsqueda de aulas y consultorios. Claro que había ascensor pero precisamente no era la primera opción, yo misma no me di cuenta de su existencia de inmediato. Creería que está es una buena opción para todos ya que ahorra energía, relaja la mente al caminar, los inquilinos con el tiempo pueden agregar plantas y adornos y puede ser una especie de area social ya que también puede funcionar como balcones. Todo esto claro basado en mi experiencia en este edificio, espero pueda ser de utilidad en futuros proyectos. Saludos!
Suena genial lo de las rampas. El principal reto suele ser el espacio, porque ocupan bastante más que una escalera convencional, y no siempre es fácil encajarlas. Pero todo es posible si se decide que es una prioridad desde el principio del proceso de diseño.
Me ha gustado mucho la descripción de esas rampas en espiral. Si recuerdas el nombre del centro, me encantaría echarle un vistazo.
Gracias por pasarte por aquí y compartir tu experiencia, Eli.
Se llama Centro de Habilidades Valientes, en Guayaquil-Ecuador que es de donde soy. Ahorita buscando en Google las primeras imágenes que aparecen del centro son justamente de las personas haciendo bailes y ejercicios en el área libre que hay en medio de las rampas que se aprecian atrás de la foto, que se puede aprovechar como área de ejercicios y recreación. Creo que no puedo comentar o postear aquí una foto como para facilitarle la imagen, pero espero haberle ayudado.
He buscado fotos en Google y se entiende perfectamente lo que comentabas: el espacio central con la rampa alrededor funciona como zona abierta y flexible.
Gracias por compartir este ejemplo tan concreto. Me lo guardo como referencia.
Me ha gustado mucho el texto y me ha hecho reflexionar.
Por "contestar" o dar mi opinión, creo que sí que prefiero que el entorno (en este caso mi edificio) me incite a tener hábitos más saludables, ya que no siento que por ello me quiten libertades o elecciones.
Por darte un dato curioso, en mi edificio lo que se usa es escalera mecánica para acceder a lo que sería la "urbanización" (hay una esceralera pequeña escondida detrás pero se usa para bajar al parking y casi nunca para subir, y el ascensor de al lado igual).
Luego ya arriba hay 5 "torres" con los pisos y 2 ascensores cada una (y por supuesto escaleras convencionales).
Me resulta gracioso después de leer tu texto pensar en mi edificio, te pasaré alguna foto/vídeo.
Interesante lo que comentas de las escaleras mecánicas, que suelen ser más comunes en edificios no residenciales, como centros comerciales. Cada vez se ven más también en ciudades para conectar calles a diferentes alturas, pero creo que siguen siendo poco habituales en urbanizaciones privadas.
Mándame esa foto o vídeo, encantado de verlo. Me gusta conocer este tipo de casos.
Que "las decisiones que no tomas se toman solas" es una frase que utilizo con mucha frecuencia. Creo que la has llevado al siguiente nivel con ejemplos tan claros. Gracias de nuevo por otra reflexión que lleva a la acción!
Buena frase que resume perfectamente la esencia del artículo: cuando no tomamos decisiones, el entorno las toma por nosotros. Me alegra que los ejemplos hayan ayudado a aterrizar la idea. Gracias, como siempre, por leer y comentar.
Me gusto mucho tu ensayo, y la decisión entre escaleras o ascensor. Finalmente, la funcionalidad de ambos es importante para gente mayor ademas del tema de sufrimiento y dolor. Queremos evitar el dolor pero sí queremos llegar a casa. El sofa entre los dos me parece estupendo, un espacio de convivio.
El otro día decidí pintar la puerta de mi cocina azul. Me costó mas trabajo convencer al cuate en la Comex venderme la pintura - quien dijo, no Señora, lo que necesita es cera y barniz - que pintar la puerta. Es un ejemplo de como tenemos la mente cerrada (algunos mas que otros), como tenemos una visión muy limitada y como tenemos una falta de imaginación. El diseño nos rodea pero mucha gente no se da cuenta.
Jeje gracias por compartir la historia de la puerta, Rosalind. Me hizo gracia… y confieso que tuve que buscar qué significa «cuate» (no utilizamos esta palabra en España)
Muchas veces damos por hecho que la opción estándar es la correcta, y no siempre es así. Me parece genial darle un toque personal al espacio que habitamos, y si eso implica pintar y repintar puertas y paredes... pues estupendo.
Estoy muy de acuerdo conque la gente debe elegir por sí misma. Yo por ejemplo, prefiero colocar el núcleo de comunicaciónes en un sitio donde yo pueda subir sin tener que charlar con nadie. Si tengo encuentros, que sea porque yo quiero y me apetece, no por coj...
Yo pensaría más en que el recorrido al ascensor o a la escalera esté inundado de luz (si es posible), que se pueda ver algo verde en el exterior, una obra de arte bien colocada... Cualificar el espacio. Porque si ese lugar nos provoca alegría o bienestar, será más probable que te apetezca interactuar con los demás.
Pienso que lo que debemos es dar opciones. Hacer una ciudad más transitable a pie, por ejemplo como tú dices, para que el que quiera andar pueda hacerlo, pero sin defenestrar al que prefiere ir en coche, o tiene motivos para desplazarse así.
Me gusta, como digo, una arquitectura que da opciones sin imponer ninguna (siempre que se pueda, claro).
Ofrecer opciones me parece uno de los objetivos clave del buen diseño. El reto aparece cuando tenemos que decidir qué priorizamos, porque es fácil caer en la trampa de asumir demasiado sobre las preferencias de quienes usarán el espacio.
La buena noticia es que hay ciertos aspectos «universales» que mejoran la experiencia de casi cualquier persona: luz natural, aire limpio, vistas al exterior, presencia de vegetación… Elementos que conectan con nuestra biología antes que con nuestra cultura.
Lo complejo empieza cuando entran en juego las subjetividades, las costumbres, las preferencias personales. Ahí es cuando hay que tomar decisiones. Y en esos casos, creo que tiene sentido priorizar lo que haya demostrado ser más saludable. Asumiendo que, como cualquier otra solución, no gustará a todo el mundo.
Gracias por tus comentarios que siempre dan que pensar, Rafa.
Confieso que siempre he sido muy consciente del 'agua', y supongo que eso me llevo inevitablemente a dedicarme a la arquitectura. Quiero decir que yo, personalmente, simpre estoy reordenando en mi cabeza los espacios que habito o los espacios que visito (precisamente acabo de tirar una pared en mi casa tras un largo proceso de reflexión...y cuando he ahorrado lo suficiente para hacer la reforma de cocina que desábamos)
En todo caso, lo que realmente quería compartir es que en el diseño, sobre todo en el diseño de espacios colectivos, dentro del conjunto 'antifrágil' creo que deberia incorporarse el diseño colaborativo.
Supongo que conoces el trabajo de urbanismo colaborativo desarrollado por Paisaje Transversal, y que han aplicado tanto a estudios urbanos como a diseño de paisaje urbano o a un proyecto tan interesantre como HarineraZGZ (https://paisajetransversal.com/portfolio/harinerazgz/; https://www.instagram.com/harinerazgz/?hl=e) Se trata de la reabilitación de un edificio industrial para converirlo en centro cultural y social colaborativo, hoy lamentablemente pervertido por el sectarismo de algunos.
Hay también casos, recientes o no tanto, de vivienda colectiva desarrollados de forma colaborativa.
El problema del diseño colaborarivo, que necesita de los profesinonales de la arquitectura para ser realmente eficaz, pero que requiere por parte del arquiotecto de unas grandes dosis de humildad y capacidad didactica, es que es mucho más complejo que preguntar a la gente como le gustaria que fuera su entorno. Requiere toma de datos, análisis, información, escucha, proposicion, debate...En fin, requiere de algo que nos enseñaron los griegos y que el capitalismo nos prostituyó: democracia.
Democracia autentica, claro, es decir, democracia informada donde las decisiones no se toman por apriorismos voluntairstas o con sesgo ideologico prejuicioso, sino como resultado de una toma de datos que sea capaz de detectar las necesidades evidentes y las no tan evidentes, las exigencias a menudo contradictorias. Y después de un análisis realizado necesariamente por expertos o profesionales (gente acostumbrada a ver 'el agua' y sus matices) que ponga encima de la mesa las opciones reales con sus ventajas e incovenientes. Y de un proceso de información de ese análisis que trasmita a los usuarios toda la información necesaria para la toma de decisiones...Todo ello sometido al riogor de una metodologia que permita que el proceso participativo sea realmente serio, no trivial.
Esto, tanto en arquitectura como en la vida en general, es algo muy trabajoso, tanto para los profesionales como para los propios ciudadanos implicados...y por eso se reduce al final a una mera consulta de un par de opciones planteadas por profesionales con buena voluntad, pero con una leve inmersión en la problematica a afrontar, y convenientemente arropados por un know how que, a menudo, es más un conjunto de apriopris que un conocimiento solido.
Pero cuando sí es posible, cuando funciona....puede dar frutos increibles.
Conozco Paisaje Transversal, pero no había visto el proyecto de la Harinera. Muy interesante.
Mi experiencia respecto al diseño colaborativo es que es útil para detectar necesidades y deseos ocultos. Pero como dices, no se trata de delegar el diseño en los usuarios, sino de incorporar su mirada como parte del proceso creativo. Hace falta un equipo que sepa traducir esas aportaciones (muy a menudo contradictorias, como dices) en un proyecto unificado y coherente. Y eso requiere tiempo, experiencia y energía, que no siempre es fácil de financiar o sostener. Igual que pasa con la evaluación posterior de los proyectos.
Enhorabuena por ese tabique de menos y ¡suerte con la reforma!
Venia leyendo el articulo y pensaba "ni escaleras ni ascensores" y me acordaba de la charla de Alberto Naisberg sobre la sociabilidad y el apoyo mutuo en su relación con la longevidad, les comparto un recorte de dos minutos de su charla sobre zonas azules.
Me acorde también de una ilustración que se titula "El tercer maestro" que habla sobre el enfoque de Loris Malaguzzi y la importancia del ambiente en la educación de infantes.
Muchas gracias por compartir ambas referencias, Juan. Súper interesantes. Precisamente hablé sobre cómo los edificios pueden ayudar a combatir la epidemia de soledad en este post: https://fcolom.substack.com/p/casas-para-vivir-mas-y-mejor
Como siempre unos temas muy interesantes, que te hacen mirar más allá de la superficie.
Como persona altamente sensible, hace años que soy consciente de ello. Suelo cambiar los muebles que puedo de sitio cuando noto mi propia energía estancada. Hace años leí también acerca del Feng Shui. La mayoría de cosas son bastante lógicas, otras hay que creer más. Mi pareja ya no se asombra cuando me ve cambiar el escritorio cuando el que tenía está en perfectas condiciones. El nuevo me motiva más a escribir :).
Y esto de cambiar las cosas de sitio para potenciar las ventas es lo que hacen en los supermercados!
En todo caso me parece más loable hacer arquitectura para fomentar buenos hábitos. No es paternalismo, al final es cash que se ahorran en salud. Y me parece increíble que en España aun no se haya entendido esto. La mayoría de nuestras ciudades están diseñadas para ir en coche. Una pena!
Gracias por compartir tu experiencia, Arau. Cambiar cosas de sitio y no asumir que todo tiene que quedarse donde está me parece muy sano. Invita a ser más conscientes de cómo vivimos y a hacer pequeños ajustes de vez en cuando.
Y muy de acuerdo en que debemos diseñar para prevenir en lugar de curar.
En cuanto a España, creo que depende mucho del punto de comparación. Viviendo en Estados Unidos, muchas ciudades españolas me parecen un paraíso para el peatón. Eso no quita que aún haya mucho margen de mejora, por supuesto.
Muy interesante, gracias por compartir. Me apunto el libro que recomiendas sobre este tema. El discurso Esto es agua de Wallace lo he leído, releído y hace años lo copié casi entero en mi cuaderno de citas de lecturas. Es magnífico
Totalmente, Sofía. Es un discurso con tantas capas de significado que cada vez que lo releemos o escuchamos nos deja algo nuevo. Gracias por leer y comentar.
Genial 👍 . Lo incluimos en el diario 📰 de Substack también?
Encantado, David. ¡Gracias!
Ahora lo propongo, Francisco.
¡Genial!
Bravo, Genial, yo ofrezco la opción de elejir por discernimiento y ante las opciones obvias del diseño de espacios, que mejor que contar con la ingeniería social positivadO vitaminada, un poco de entorno distruptivo, incita a elegir, a cuestionar a pensar y eso es siempre bueno para todos!
Maravilloso tu texto, gracias por compartir tu sabiduría y experiencia.
Me gusta mucho esa idea del entorno que no lo da todo resuelto, sino que incita a elegir, a cuestionar, a pensar. ¿Un espacio que nos entrena en la toma de decisiones? Tiene mucha fuerza. Gracias por compartirlo, Judith.
Que sencillamente explicas lo complicado. ¡Grande! ♥️
¡Gracias, Jorge! Es el mejor piropo que a uno le pueden echar. Te lo agradezco.
Excel.lent
¡Gracias, Van!
Me ha parecido muy interesante tu aproximación a la creación de entornos saludables.
Por ejemplo, en marketing (como ciencia social) hay un área que se llama "merchandising" que se enfoca en el diseño y distribución interior de las tiendas o comercios (como los restaurantes). Así, que también todo está muy "pensando" para proveer una experiencia a la persona consumidora. Por ejemplo, el hecho que en los casinos no haya ventanas o luz natural o relojes no es casualidad; o que en el supermercado los chicles y dulces estén cerca a la caja registradora, tampoco lo es.
Me parece clave el punto de retroalimentación ambiente-persona, en el sentido que puede ser bidireccional, no somos víctimas como bien indicas Francisco.
Me llevo temas para reflexionar, gracias.
Muy buenos ejemplos, Liliana. El de los casinos me ha parecido especialmente claro: espacios diseñados para que perdamos la noción del tiempo y sigamos consumiendo.
Una vez entendemos que el diseño no es neutral, podemos empezar a detectar cuándo juega a nuestro favor y cuándo en nuestra contra. Esa toma de conciencia es un gran primer paso.
Qué tal rampas en vez de escaleras?
En un centro lúdico para personas con discapacidad donde hice un voluntariado había rampas en espiral por obvias razones y facilitaba el acceso e independencia de las personas de cualquier edad y condición, cómo ceguera, discapacidad intelectual, o discapacidades físicas, además de que la vista no tenía que estar necesariamente viendo constantemente al piso sino que podía pasear y apreciar los detalles del edificio y agilizar la búsqueda de aulas y consultorios. Claro que había ascensor pero precisamente no era la primera opción, yo misma no me di cuenta de su existencia de inmediato. Creería que está es una buena opción para todos ya que ahorra energía, relaja la mente al caminar, los inquilinos con el tiempo pueden agregar plantas y adornos y puede ser una especie de area social ya que también puede funcionar como balcones. Todo esto claro basado en mi experiencia en este edificio, espero pueda ser de utilidad en futuros proyectos. Saludos!
Suena genial lo de las rampas. El principal reto suele ser el espacio, porque ocupan bastante más que una escalera convencional, y no siempre es fácil encajarlas. Pero todo es posible si se decide que es una prioridad desde el principio del proceso de diseño.
Me ha gustado mucho la descripción de esas rampas en espiral. Si recuerdas el nombre del centro, me encantaría echarle un vistazo.
Gracias por pasarte por aquí y compartir tu experiencia, Eli.
Se llama Centro de Habilidades Valientes, en Guayaquil-Ecuador que es de donde soy. Ahorita buscando en Google las primeras imágenes que aparecen del centro son justamente de las personas haciendo bailes y ejercicios en el área libre que hay en medio de las rampas que se aprecian atrás de la foto, que se puede aprovechar como área de ejercicios y recreación. Creo que no puedo comentar o postear aquí una foto como para facilitarle la imagen, pero espero haberle ayudado.
He buscado fotos en Google y se entiende perfectamente lo que comentabas: el espacio central con la rampa alrededor funciona como zona abierta y flexible.
Gracias por compartir este ejemplo tan concreto. Me lo guardo como referencia.
Me ha gustado mucho el texto y me ha hecho reflexionar.
Por "contestar" o dar mi opinión, creo que sí que prefiero que el entorno (en este caso mi edificio) me incite a tener hábitos más saludables, ya que no siento que por ello me quiten libertades o elecciones.
Por darte un dato curioso, en mi edificio lo que se usa es escalera mecánica para acceder a lo que sería la "urbanización" (hay una esceralera pequeña escondida detrás pero se usa para bajar al parking y casi nunca para subir, y el ascensor de al lado igual).
Luego ya arriba hay 5 "torres" con los pisos y 2 ascensores cada una (y por supuesto escaleras convencionales).
Me resulta gracioso después de leer tu texto pensar en mi edificio, te pasaré alguna foto/vídeo.
Interesante lo que comentas de las escaleras mecánicas, que suelen ser más comunes en edificios no residenciales, como centros comerciales. Cada vez se ven más también en ciudades para conectar calles a diferentes alturas, pero creo que siguen siendo poco habituales en urbanizaciones privadas.
Mándame esa foto o vídeo, encantado de verlo. Me gusta conocer este tipo de casos.
Que "las decisiones que no tomas se toman solas" es una frase que utilizo con mucha frecuencia. Creo que la has llevado al siguiente nivel con ejemplos tan claros. Gracias de nuevo por otra reflexión que lleva a la acción!
Buena frase que resume perfectamente la esencia del artículo: cuando no tomamos decisiones, el entorno las toma por nosotros. Me alegra que los ejemplos hayan ayudado a aterrizar la idea. Gracias, como siempre, por leer y comentar.
Me gusto mucho tu ensayo, y la decisión entre escaleras o ascensor. Finalmente, la funcionalidad de ambos es importante para gente mayor ademas del tema de sufrimiento y dolor. Queremos evitar el dolor pero sí queremos llegar a casa. El sofa entre los dos me parece estupendo, un espacio de convivio.
El otro día decidí pintar la puerta de mi cocina azul. Me costó mas trabajo convencer al cuate en la Comex venderme la pintura - quien dijo, no Señora, lo que necesita es cera y barniz - que pintar la puerta. Es un ejemplo de como tenemos la mente cerrada (algunos mas que otros), como tenemos una visión muy limitada y como tenemos una falta de imaginación. El diseño nos rodea pero mucha gente no se da cuenta.
¿Y mi puerta azul? Está bellísima!
Jeje gracias por compartir la historia de la puerta, Rosalind. Me hizo gracia… y confieso que tuve que buscar qué significa «cuate» (no utilizamos esta palabra en España)
Muchas veces damos por hecho que la opción estándar es la correcta, y no siempre es así. Me parece genial darle un toque personal al espacio que habitamos, y si eso implica pintar y repintar puertas y paredes... pues estupendo.
Perdon, esa palabra cuate es como "guy" o "bloke" en inglés. Es una palabra muy mexicana, eso si.
Me encantó conocerla, voy expandiendo mi vocabulario 😉
Estoy muy de acuerdo conque la gente debe elegir por sí misma. Yo por ejemplo, prefiero colocar el núcleo de comunicaciónes en un sitio donde yo pueda subir sin tener que charlar con nadie. Si tengo encuentros, que sea porque yo quiero y me apetece, no por coj...
Yo pensaría más en que el recorrido al ascensor o a la escalera esté inundado de luz (si es posible), que se pueda ver algo verde en el exterior, una obra de arte bien colocada... Cualificar el espacio. Porque si ese lugar nos provoca alegría o bienestar, será más probable que te apetezca interactuar con los demás.
Pienso que lo que debemos es dar opciones. Hacer una ciudad más transitable a pie, por ejemplo como tú dices, para que el que quiera andar pueda hacerlo, pero sin defenestrar al que prefiere ir en coche, o tiene motivos para desplazarse así.
Me gusta, como digo, una arquitectura que da opciones sin imponer ninguna (siempre que se pueda, claro).
Ofrecer opciones me parece uno de los objetivos clave del buen diseño. El reto aparece cuando tenemos que decidir qué priorizamos, porque es fácil caer en la trampa de asumir demasiado sobre las preferencias de quienes usarán el espacio.
La buena noticia es que hay ciertos aspectos «universales» que mejoran la experiencia de casi cualquier persona: luz natural, aire limpio, vistas al exterior, presencia de vegetación… Elementos que conectan con nuestra biología antes que con nuestra cultura.
Lo complejo empieza cuando entran en juego las subjetividades, las costumbres, las preferencias personales. Ahí es cuando hay que tomar decisiones. Y en esos casos, creo que tiene sentido priorizar lo que haya demostrado ser más saludable. Asumiendo que, como cualquier otra solución, no gustará a todo el mundo.
Gracias por tus comentarios que siempre dan que pensar, Rafa.
Confieso que siempre he sido muy consciente del 'agua', y supongo que eso me llevo inevitablemente a dedicarme a la arquitectura. Quiero decir que yo, personalmente, simpre estoy reordenando en mi cabeza los espacios que habito o los espacios que visito (precisamente acabo de tirar una pared en mi casa tras un largo proceso de reflexión...y cuando he ahorrado lo suficiente para hacer la reforma de cocina que desábamos)
En todo caso, lo que realmente quería compartir es que en el diseño, sobre todo en el diseño de espacios colectivos, dentro del conjunto 'antifrágil' creo que deberia incorporarse el diseño colaborativo.
Supongo que conoces el trabajo de urbanismo colaborativo desarrollado por Paisaje Transversal, y que han aplicado tanto a estudios urbanos como a diseño de paisaje urbano o a un proyecto tan interesantre como HarineraZGZ (https://paisajetransversal.com/portfolio/harinerazgz/; https://www.instagram.com/harinerazgz/?hl=e) Se trata de la reabilitación de un edificio industrial para converirlo en centro cultural y social colaborativo, hoy lamentablemente pervertido por el sectarismo de algunos.
Hay también casos, recientes o no tanto, de vivienda colectiva desarrollados de forma colaborativa.
El problema del diseño colaborarivo, que necesita de los profesinonales de la arquitectura para ser realmente eficaz, pero que requiere por parte del arquiotecto de unas grandes dosis de humildad y capacidad didactica, es que es mucho más complejo que preguntar a la gente como le gustaria que fuera su entorno. Requiere toma de datos, análisis, información, escucha, proposicion, debate...En fin, requiere de algo que nos enseñaron los griegos y que el capitalismo nos prostituyó: democracia.
Democracia autentica, claro, es decir, democracia informada donde las decisiones no se toman por apriorismos voluntairstas o con sesgo ideologico prejuicioso, sino como resultado de una toma de datos que sea capaz de detectar las necesidades evidentes y las no tan evidentes, las exigencias a menudo contradictorias. Y después de un análisis realizado necesariamente por expertos o profesionales (gente acostumbrada a ver 'el agua' y sus matices) que ponga encima de la mesa las opciones reales con sus ventajas e incovenientes. Y de un proceso de información de ese análisis que trasmita a los usuarios toda la información necesaria para la toma de decisiones...Todo ello sometido al riogor de una metodologia que permita que el proceso participativo sea realmente serio, no trivial.
Esto, tanto en arquitectura como en la vida en general, es algo muy trabajoso, tanto para los profesionales como para los propios ciudadanos implicados...y por eso se reduce al final a una mera consulta de un par de opciones planteadas por profesionales con buena voluntad, pero con una leve inmersión en la problematica a afrontar, y convenientemente arropados por un know how que, a menudo, es más un conjunto de apriopris que un conocimiento solido.
Pero cuando sí es posible, cuando funciona....puede dar frutos increibles.
Guau. ¡Gracias, Guillermo!
Conozco Paisaje Transversal, pero no había visto el proyecto de la Harinera. Muy interesante.
Mi experiencia respecto al diseño colaborativo es que es útil para detectar necesidades y deseos ocultos. Pero como dices, no se trata de delegar el diseño en los usuarios, sino de incorporar su mirada como parte del proceso creativo. Hace falta un equipo que sepa traducir esas aportaciones (muy a menudo contradictorias, como dices) en un proyecto unificado y coherente. Y eso requiere tiempo, experiencia y energía, que no siempre es fácil de financiar o sostener. Igual que pasa con la evaluación posterior de los proyectos.
Enhorabuena por ese tabique de menos y ¡suerte con la reforma!
Venia leyendo el articulo y pensaba "ni escaleras ni ascensores" y me acordaba de la charla de Alberto Naisberg sobre la sociabilidad y el apoyo mutuo en su relación con la longevidad, les comparto un recorte de dos minutos de su charla sobre zonas azules.
https://youtu.be/h-eujW8T74o?si=9EVj1beE0BucLNrE&t=1123 (marcador 18:40)
Me acorde también de una ilustración que se titula "El tercer maestro" que habla sobre el enfoque de Loris Malaguzzi y la importancia del ambiente en la educación de infantes.
https://sketchplanations.com/the-third-teacher
Muchas gracias por compartir ambas referencias, Juan. Súper interesantes. Precisamente hablé sobre cómo los edificios pueden ayudar a combatir la epidemia de soledad en este post: https://fcolom.substack.com/p/casas-para-vivir-mas-y-mejor
Respecto a "el tercer maestro", justo hoy han publicado este otro post Pat & Vif: https://dosisdediseno.substack.com/p/cuando-el-espacio-tambien-educa
Como siempre unos temas muy interesantes, que te hacen mirar más allá de la superficie.
Como persona altamente sensible, hace años que soy consciente de ello. Suelo cambiar los muebles que puedo de sitio cuando noto mi propia energía estancada. Hace años leí también acerca del Feng Shui. La mayoría de cosas son bastante lógicas, otras hay que creer más. Mi pareja ya no se asombra cuando me ve cambiar el escritorio cuando el que tenía está en perfectas condiciones. El nuevo me motiva más a escribir :).
Y esto de cambiar las cosas de sitio para potenciar las ventas es lo que hacen en los supermercados!
En todo caso me parece más loable hacer arquitectura para fomentar buenos hábitos. No es paternalismo, al final es cash que se ahorran en salud. Y me parece increíble que en España aun no se haya entendido esto. La mayoría de nuestras ciudades están diseñadas para ir en coche. Una pena!
Gracias por compartir tu experiencia, Arau. Cambiar cosas de sitio y no asumir que todo tiene que quedarse donde está me parece muy sano. Invita a ser más conscientes de cómo vivimos y a hacer pequeños ajustes de vez en cuando.
Y muy de acuerdo en que debemos diseñar para prevenir en lugar de curar.
En cuanto a España, creo que depende mucho del punto de comparación. Viviendo en Estados Unidos, muchas ciudades españolas me parecen un paraíso para el peatón. Eso no quita que aún haya mucho margen de mejora, por supuesto.